Adapta tus metas financieras al esquema SMART
El establecimiento de metas financieras es crucial para lograr la estabilidad y el éxito económico. La metodología SMART es una herramienta efectiva para definir y alcanzar metas de manera más efectiva. A continuación, cómo adaptar metas financieras al esquema SMART:
1. Específicas (Specific):
- Ejemplo no SMART: «Ahorrar dinero».
- Ejemplo SMART: «Ahorrar L. 5,000 en una cuenta de ahorros para emergencias en los próximos 12 meses».
- Al ser específico, se proporciona un objetivo claro y medible. En este caso, se especifica la cantidad exacta y el plazo para alcanzarla.
2. Medibles (Measurable):
- Ejemplo no SMART: «Reducir deudas».
- Ejemplo SMART: «Pagar L. 2,000 de deudas de tarjetas de crédito en los próximos seis meses».
- Al ser medible, puedes evaluar fácilmente el progreso. En este ejemplo, se establece una cantidad específica de deudas a pagar y un plazo temporal.
3. Alcanzables (Achievable):
- Ejemplo no SMART: «Hacerse millonario en un año sin cambiar nada en mi estilo de vida».
- Ejemplo SMART: «Incrementar mis ingresos en un 15% este año mediante la obtención de una certificación adicional».
- Las metas deben ser desafiantes pero alcanzables. En este caso, se plantea un objetivo realista que implica un esfuerzo adicional pero que es alcanzable con una acción específica.
4. Relevantes (Relevant):
- Ejemplo no SMART: «Invertir en criptomonedas solo porque está de moda».
- Ejemplo SMART: «Diversificar mi cartera de inversiones asignando un 10% a acciones de tecnología de crecimiento».
- La meta debe ser relevante para tus objetivos generales. En este ejemplo, la inversión se vincula a una estrategia más amplia de diversificación de la cartera.
5. Con plazo temporal (Time-bound):
- Ejemplo no SMART: «Ahorrar para el retiro».
- Ejemplo SMART: «Contribuir con L.1,000 cada mes a mi cuenta de jubilación durante los próximos 20 años».
- Establecer un plazo temporal proporciona una estructura de tiempo clara. En este caso, se especifica la cantidad a ahorrar mensualmente y la duración del plan.
Al adaptar tus metas financieras al esquema SMART, las haces más específicas, alcanzables y medibles, lo que facilita el seguimiento y la consecución de tus objetivos financieros. Recuerda revisar y ajustar tus metas según sea necesario a lo largo del tiempo.